UN 2 DE OCTUBRE DE 2008

Por Elizabeth Suárez Delgado, Víctor Hugo Hernández Bocanegra.

Cada año alumnos, profesores, organizaciones civiles, sindicatos y ex líderes del movimiento estudiantil en México se congregan en una marcha multitudinaria para recordar los acontecimientos políticos y sociales que derivaron en la matanza de estudiantes, un 2 de octubre de 1968.

Este año es especial debido a que se conmemoran 40 años desde entonces, y si bien las condiciones son diferentes respecto a que hoy en día existe mayor libertad de expresión y se cuenta con herramientas tan importantes como las cámaras de los celulares e internet, el 2 de octubre aún duele…

TODOS SOMOS 2 DE OCTUBRE…

Desde la Plaza de las Tres Culturas, la gente se fue sumando a los contingentes que avanzaban por avenidas tan trascendentes para la capital como lo son Reforma, Juárez y Madero para arribar al Zócalo capitalino.

Para amenizar el recorrido, cada agrupación entonaba consignas populares que iban desde el clásico “dos de octubre no se olvida” hasta otras más enérgicas en contra del actual presidente de nuestro país, Felipe Calderón Hinojosa. “Felipiiito…culeriiito. Felipooote…culerooote…”.

“Aplauudan…aplauudan no dejen de aplaudir…que el piinche gobierno se tiene que moriir” se escuchaba a lo largo del Paseo de la Reforma, avenida en la que hace algunos siglos atrás el Emperador Maximiliano junto con su acompañante Carlota pasearan en glamorosos carruajes importados desde Austria.

..AUNQUE NO TODOS SABEN LO QUE PASÓ…

“Presos políticos…¡libertad!…¡libertad!…¡libertad!…a los presos por lucha” fue otra de las consignas generalizadas, apropiadas para cualquier agrupación, apropiada para cualquier ocasión, ¿cuándo no sino este día?.

Para Fabiola, estudiante de preparatoria, en esta fecha sólo algunos recuerdan lo que pasó en 1968, no obstante, “los ´porros´ (agrupaciones juveniles radicales y violentas) sólo vienen a hacer desmadre (desorden), nunca le proporcionan un significado a lo que ocurrió en esa reunión estudiantil en Tlatelolco”.

Y agrega una moraleja para todo aquel estudiante de aquel entonces y de hoy en día: “todos debemos luchar por no ser reprimidos por ninguna autoridad”.

Al finalizar la marcha un grupo de jóvenes se enfrentaron a la policía, y para los medios tradicionales de comunicación, este hecho fue lo único memorable de este 2 de octubre…