LA REINA DEL PACÍFICO: ES LA HORA DE CONTAR

Por: Víctor Hugo Hernández Bocanegra.

La historia es la siguiente: Julio Scherer García, icono del periodismo mexicano y fundador de la revista Proceso se da a la tarea de contactar al director de los reclusorios de la Ciudad de México, Antonio Hazahel Ruiz, para entrevistar en el reclusorio femenil de Santa Martha Acatitla a Sandra Ávila Beltrán, la Reina del Pacífico.

Sandra Ávila Beltrán vendría a ser un personaje más dentro de esta complicada trama, si no fuera por el hecho de dos “ingredientes” sumamente interesantes. Primero: ser el enlace de los cárteles mexicanos con los grandes capos colombianos, y segundo: ser bella.

A esta intriga se le suma la acusación, juicio y sentencia de un presidente: Felipe Calderón Hinojosa; quién tiene la oportunidad de asestar un golpe mediático y sumarlo a su lucha contra el narcotráfico al etiquetar a Sandra Ávila Beltrán como "la Reina del Pacífico".

La información brota a cuentagotas, dos visitas a la semana durante varios meses, muchas horas de grabación y muchos temas: dinero, drogas, narcotráfico, crímenes, asesinatos, víctimas, impunidad, fama, excesos, corrupción, etc. entre los que se mezclan nombres: un tal Osiel Cárdenas Guillén, un Rafael Caro Quintero, un Mayo Zambada.

La utilería es glamorosa: vestidos, abrigos, automóviles Mercedes, BMW, juguetes; lo son también los escenarios: Tijuana, Culiacán, Guadalajara, Colombia; todo ello narrado a viva voz con una prosa improvisada que sale de los labios de una mujer sensual y musicalizado por Los Tucanes de Tijuana.

Esta historia está llena de acción (abundan las metralletas y los cuernos de chivo), el suspenso lo otorgan los protagonistas confundidos con los antagonistas; la intriga la aportan las agencias: una Agencia Federal de Investigación (AFI), una Agencia Antinarcóticos (DEA), una Procuraduría General de la República (PGR), una Subprocuraduría de Investigaciones Especiales en Delincuencia Organizada (SIEDO).

Además cuenta con extras de primer orden: ex presidentes, primeras damas, políticos influyentes, empresarios. Entre tantos balazos aún existe lugar para el amor en una sociedad de narcos, cuyas leyes nadie comprende...pero todos conocen.

El final de la historia aún no es revelado, "La Reina del Pacífico: es la hora de contar" es un libro que mantendrá al lector al filo de su asiento; indispensable para todo aquel fanático del narcotráfico, el periodismo y la política. Si aún no lo convenzo de adquirir dicha obra, tan sólo faltará mencionar que "La Reina del Pacifico" está basado en hechos reales. Una historia como tantas en nuestro país.